En la antigüedad se le conocía como «Las Cascadas de la Guacamaya», cuyo significado es «hijos de los que interpretan los sueños», nombre coloquial dado por Los indígenas Muysqas- Chibchas a este territorio sagrado, en la montaña al norte del «Valle de Zaquenzipá», en el actual río «la cebada», del sector del «Uvalito».
Ya después, los conquistadores españoles la llamaron «La Periquera», en alusión a la gran cantidad de pericos o periquitos, que habitaban en el lugar porque habían muchos cultivos de cereales como cebada y trigo. Pero debido a los cultivos irresponsables, con sus ruidos y químicos, han ido migrando y/o desapareciendo.
Por eso, una de nuestras misiones y compromisos con este territorio sagrado es, recuperar todo su habitad natural, con su flora y fauna silvestre, ademas de todo su aspecto sagrado y espiritual, como nuestros ancestros los Muysqas-Chibchas lo hicieron.