Este es el titulo de una de las canciones del grupo español a Dos Velas, que al analizar su real y noble significado, encontramos que la verdad es que: “VAMOS A TENER QUE QUERERNOS MAS”.
El ego, el mayor enemigo del ser humano, el que nos ha llevado a librar batallas en la mayoría de las veces para alimentar el orgullo, el deseo de sentirnos reconocidos y admirados por los demás dándole la trascendencia a muchas situaciones que no la ameritan; los políticos en su mayoría piensan que la ejecución de proyectos o de determinadas políticas, los convierte en merecedores de un mayor poder que el resto. Si un número suficiente de personas se concientizara y analizara el poder del ego sobre si mismo, con el deseo profundo y amoroso de destruirlo, este mundo cambiaría. Tenemos una misión grande a desarrollar en nuestras vidas, aquella que nos va permitir ser mejores seres humanos, verdaderamente, querernos más, y es la de identificar y destruir nuestro propio ego, encontrando la real y verdadera grandeza.
Cuando el verdadero amor se nos enbolata, se nos pierde en el camino, perdemos también nuestra felicidad, esta, que es nuestro mayor y verdadero objetivo. A este mundo vinimos a ser felices; algunas culturas, religiones y sistemas, convencieron de una manera equivocada a innumerables grupos de personas, que a este mundo vinimos a sufrir, que tenemos que pagar por nuestros errores y desatinos y que la felicidad esta en la mayor cantidad de bienes materiales, posiciones ególatras y/o en otra gran cantidad de placeres y vicios mundanos. La FELICIDAD (Definición: La felicidad es un estado de ánimo caracterizado por dotar a la personalidad de quien la posee de un enfoque del medio positivo y un estado de paz interior. Es definida como una condición interna de satisfacción y alegría.), está en nuestro interior, no la busquemos en ninguna otra parte, en ningún placer mundano negativo que afecte en forma directa o indirecta mi evolución como hombre, como ser humano, como persona de bien; seamos dueños de nuestras propias emociones, querámonos más para poder compartir con los demás nuestro tesoro mas preciado, nuestra grandeza de amor.
Pero para encontrar esta FELICIDAD verdadera, nos corresponde vivir toda experiencia correspondiente en este nuestro paso por la vida, buena o mala no importa, son todas estas, las que hacen que nuestra evolución fluya, crezca con miras a una plenitud interior duradera que nos hace sentir en nuestro interior amor puro.
La FELICIDAD, entendido ya, que no se da por si sola, exige de un gran empeño en la dedicación de su búsqueda, APRENDIENDO de todas las personas, respetando sin juzgamiento alguno, aceptando a cada ser humano tal y como es, entendiendo su proceso y nivel de evolución, algo aprenderemos de ellas y algo aprenderán de nosotros. Situaciones, momentos difíciles, alegres, repletos de información positiva, en algunos casos negativa, con los que la vida nos vuelve correspondientes, nada de lo que la vida nos brinda es por casualidad, siempre nos esta invitando a tener conciencia.
Vocación de SERVICIO, otro de los tres puntos importantes de una buena filosofía de vida, me atrevería con toda seguridad a afirmar que sin esta vocación no encontraríamos la FELICIDAD verdadera. Tenemos que aprender a dar y a dar lo mejor de nosotros, porque en eso radica la verdadera grandeza del amor y entonces ahí es cuando este universo perfecto nos devuelve y nos devuelve en mucho mayor cantidad de lo que verdaderamente dimos con amor.
Pesemos a ver si en realidad “VAMOS A TENER QUE QUERERNOS MAS” , pero todo tiene que empezar en la conciencia de cada uno de nosotros, el cambio tiene que darse en cada uno de nosotros; querámonos mas, ayudémonos mas, llenémonos de amor y compartamos lo mejor de nosotros con lo que yo llamo: todos nuestros seres correspondientes.